Muchas me pregunto al ver una película de ese tamaño, ¿cómo es que hacen eso?. Y la verdad es que la cinta “Transformers: Revenge of the Fallen” tiene esa escena que soñé de niño, la que imaginé muchas veces; la que sigo tratando de bocetar; pero al ver en la película la escena completa con la buena envidia descanso en mi intento de no haberla recreado; romper una máquina como una hoja de papel.
Cuando ves que tu imaginación viene a la realidad, que lo que alguna vez quisiste dibujar alguien más ya lo hace con movimiento, ya sólo te queda respirar tranquilo y disfrutar los 52 pesos de la entrada, sabes que fueron bien empleados.
Y a dedicarte a otra cosa.
Para muchos podrá parecer cargada y con mucho movimiento, cansada, pero para es casi perfecta, los 144 minutos se pasan rápido, no hay filosofía, no hay decisión ni duda, todo es claro y conciso, no hay que adivinar nada, solo hay que ver la cinta.
Tecnológicamente sí creo, que mi modesta mac o la pobre PC tardaría miles de años en recrear alguna de las escenas de la película, eso considerando que pudiera conceptualizar y recrear los modelos, los polígonos, texturas, colores formas, secuencias y movimientos que, sinceramente, son una verdadera obra de arte, de la técnica, el talento y la tecnología. Que más decir.
Una película para la historia diría yo.
Aquí estamos.